Renzo Cairús, capitán dentro de la pista y ejemplo fuera de ella

El capitán del Voley Palma alterna el trabajo de técnico instalador por la mañana y los entrenamientos con el club por la tarde. Es la primera vez que el uruguayo se ve en esta situación, algo que asume le ha costado, pero a lo que ya se ha acostumbrado. “No tengo tanto tiempo en el día para dedicárselo al voleibol y el jugador tiene que vivir por el voleibol, pensar en voleibol y dormir con el voleibol. Este año no está pasando, pero no es excusa”, declara el receptor.

Es un año difícil para todos. Desde que se abrió el melón de la temporada el Voley Palma ya supo que el objetivo de este año era salvarlo. Una vez te quedas sin el patrocinador principal -y con el cual contabas desde hacía meses- los malabares para salir a pista se hacen desde todos los estamentos del club. Desde las oficinas hasta la pista. Desde Carlos García hasta Renzo Cairús, pasando por Abel Bernal. Precisamente el capitán del equipo, Cairús, encarna a la perfección lo que está siendo el curso para el club balear. El esfuerzo que está realizando esta temporada el uruguayo es uno de esos que nadie ve ni se da cuenta, pero que el propio jugador paga de forma física y mental. “Tengo dos trabajos. Hay mucha gente que juega a este deporte que lo hace diariamente y si lo hacen ellos por qué no lo voy a poder hacer yo”, apunta el capitán del Voley Palma. Renzo esta temporada es, a parte de jugador de voleibol, técnico instalador de accesorios contra incendios. “Cada día me levanto a las ocho de la mañana, entro a trabajar a las nueve y a las cinco salgo. Vengo a hacer el gimnasio que me toca si ese día hay gimnasio y luego paso a la pista”, explica el uruguayo. Y es que esto también es ayudar, y mucho, a la supervivencia del club.

El compromiso que siente el 11 hacia el Voley Palma es incalculable. El receptor está jugando su novena temporada en Son Moix, pero asume que es la primera vez que se ve en esta situación, “mucha gente lo hace y poco a poco he acostumbrado mi cuerpo. Creo que no lo estoy haciendo mal, físicamente me encuentro bien…podría estar mejor porque lo ideal es entrenar por la mañana y por la tarde con descanso, pero es cuestión de acostumbrar el cuerpo. Cansa mucho mentalmente, aunque una vez que te dices “espabila, es lo que hay, hay que tirar para adelante porque tienes que salir de alguna manera” lo haces”, declara Cairús. Aún así, el uruguayo reconoce que a nivel deportivo el hecho de compaginar dos trabajos le puede mermar los fines de semana: “Para un deportista los periodos de descanso también es entrenamiento. Lo mental, estar concentrado diariamente en los entrenamientos y en los partidos, no tengo tanto tiempo en el día para dedicárselo al voleibol y el jugador tiene que vivir por el voleibol, pensar en voleibol y dormir con el voleibol. Este año no está pasando, pero no es excusa de nada. El día a día es complicado, pero bueno…”, concluye Cairús, quien a medida que cuenta su situación se da cuenta del mérito que tiene.

De todas maneras, el uruguayo parece haber acostumbrado su cuerpo a la exigencia a la que le expone diariamente. Renzo Cairús ha anotado más de 20 puntos en tres de los últimos cuatro partidos. Al ser preguntado si ha cambiado algo en el último mes… “Yo no vengo a jugar para mí, a mí me da igual hacer 20, 30 o 0 puntos, me da exactamente igual, yo lo que quiero es que el equipo gane, y si hace falta que no haga ningún punto no lo hago y estaré contento. Más incluso que si hago 20 puntos, el objetivo para mí es ganar el partido”, sentencia el capitán del equipo. Además, añade que “tú me dices que he mejorado en estos últimos partidos y yo te digo que puede ser que sí por el hecho de que el equipo necesita que yo haga esto en este momento y lo intento hacer”. El 11 prioriza lo colectivo a lo individual, es por ello por lo que no para de ensalzar el valor que tiene lo que está haciendo el club esta temporada. “Es muy difícil lo que estamos haciendo. Empezamos con un equipo súper joven, sin espónsor, se te va a mitad de temporada el colocador y después el central, los dos titulares…yo quisiera ver a cualquier equipo que reaccione así cómo lo estamos haciendo, es muy complicado. Podríamos estar mentalmente destruidos, pero no veo eso, veo ganas de mejorar, progresar y alcanzar el objetivo que es ganar todos los partidos que podamos y no descender. Se lo agradezco a los compañeros y se demuestra la calidad de personas que tenemos en la plantilla”. Y es ahí cuando Renzo expresa en palabras el amor que siente hacia el club: “Es lo que me gusta del Voley Palma, siempre ha habido personas muy buenas y siempre nos hemos apoyado los unos a los otros”. Cairús, capitán dentro de la pista y ejemplo fuera de ella, representa con orgullo lo que es el Voley Palma.